Los proveedores de automoción destacan el papel estratégico de la política de semiconductores de la UE

En relación con la escasez de semiconductores que afecta a la industria del automóvil, Thorsten Muschal, Presidente de CLEPA, la Asociación Europea de Proveedores de la Automoción, afirma que "el segundo trimestre de 2021 ha sido muy difícil, y todavía vemos interrupciones en la fabricación, con retrasos en la producción y situaciones ocasionales de parada y arranque. Aunque la crisis aún no ha terminado, creemos que hemos visto lo peor y no es probable que la situación se deteriore aún más. Pero no se puede descartar que los efectos se dejen sentir más allá, hasta bien entrado el año 2022. Estas circunstancias también tienen un impacto indirecto en los proveedores que no utilizan semiconductores para su propia cartera de productos, por lo que afecta a toda la cadena de suministro de la automoción".  

En vista de la importancia estratégica de los semiconductores para la industria del automóvil, CLEPA ha elaborado un informe con recomendaciones sobre políticas basadas en las aportaciones de sus empresas miembros. Este documento proporciona orientación sobre cómo fortalecer la resistencia de la cadena de suministro en la UE y ofrece principios para una industria europea fuerte en microelectrónica. 

Una respuesta oportuna a la crisis de los semiconductores es esencial para reforzar la competitividad de la UE y proteger los puestos de trabajo de miles de ciudadanos en la UE. Sólo los proveedores del sector del automóvil emplean a 1,7 millones de personas en empresas que desarrollan tecnologías de movilidad sostenibles, inteligentes y seguras. La automoción es responsable del 37% de la demanda de semiconductores en Europa, frente a una cuota de demanda mundial del 10%. Según el informe de CLEPA, el éxito de la estrategia de la UE en materia de microelectrónica sólo puede lograrse aprovechando el papel central de los proveedores del sector del automóvil. 

La Comisión Europea ha identificado los vehículos conectados y autónomos como una oportunidad estratégica para la UE. Los sistemas avanzados de asistencia al conductor están desempeñando un papel esencial en el avance hacia una movilidad más segura y neutra desde el punto de vista climático. Además de impulsar los beneficios sociales, esta tecnología ha aumentado la cuota de valor de los sistemas electrónicos y de semiconductores hasta el 35% del coste de un coche, y es probable que siga creciendo hasta el 50% con el desarrollo de los vehículos conectados y autónomos. 

El enfoque en las PYMES 

El informe del CLEPA presta especial atención al papel de las pequeñas y medianas empresas (PYME). La movilidad inteligente plantea grandes retos a las PYME, que deben transformar rápidamente sus líneas de producción y replantearse su acceso a los materiales. Sin condiciones e inversiones que apoyen a los departamentos de I+D y al despliegue industrial, algunas de las empresas más pequeñas podrían no ser capaces de satisfacer la demanda, lo que podría afectar gravemente al empleo. 

"Las pequeñas y medianas empresas se encuentran en una posición especialmente difícil porque a menudo están más sujetas a las circunstancias que al dominio de las soluciones, y dependen en gran medida de las decisiones que toman otros en la cadena de suministro, tanto en el extremo del proveedor de materiales como en el del cliente", afirma Marco Stella, vicepresidente y representante de las PYME de CLEPA, y director general de la PYME italiana Duerri Tubi Style. "Especialmente para las que aún tienen poca liquidez, que todavía se están recuperando de la pandemia, puede surgir la necesidad de evaluar los niveles de empleo. El reto aquí es mantener la capacidad de responder inmediatamente de nuevo cuando el mercado de suministro de materiales y de clientes se recupera." 

Componente crítico  

La escasez de chips ya ha retrasado la producción de 500.000 vehículos en todo el mundo. En la UE, algunos fabricantes de vehículos han reducido sus actividades de producción. Es probable que la escasez de chips semiconductores limite la capacidad de los fabricantes para restablecer los inventarios mundiales de vehículos hasta finales de 2021 o principios de 2022.  

Se estima que en Europa los niveles de existencias gozan de buena salud, con 60 días entre la producción y el momento en que los vehículos salen a la carretera, lo que sugiere que las interrupciones de la producción han tenido, por término medio, consecuencias limitadas para que los fabricantes de vehículos puedan satisfacer la demanda. Queda por saber si el suministro de las empresas estará en la misma situación el año que viene. Y es aquí donde los puestos de trabajo corren un gran riesgo.  

Los chips de los procesadores avanzados instalados en las unidades de control electrónico son esenciales para el rendimiento de los vehículos de hoy en día. Un coche moderno puede contener unas 100 unidades de control electrónico, y entre 20 y 40 microcontroladores encargados de funciones como el motor y la dirección asistida, el cierre de puertas o el acceso sin llave. La electrificación del sistema de propulsión y el desarrollo de vehículos conectados y autónomos reforzarán aún más la importancia de los chips semiconductores. 

La industria europea de la automoción obtiene el 60-70% de los chips para producción mediante contrato con instalaciones de fabricación en Taiwán y China. Europa tiene una capacidad de diseño de chips relativamente fuerte, pero la industria sin fábricas de la UE especializada en el diseño de chips se redujo en un 50% en los últimos 10 años, lo que pone de manifiesto la necesidad de reevaluar las dependencias de la cadena de suministro en el área crítica de la tecnología de semiconductores.  

Puedes descargarte el informe completo en este enlace