Aprobado nuevo Reglamento General de Seguridad
El pasado mes el Parlamento Europeo aprobó un nuevo Reglamento General de Seguridad (GSR) el cual obligará, a partir del 2024 a todos los vehículos de motor, a estar equipados con una serie de dispositivos de seguridad avanzada.
Este nuevo Reglamento General de Seguridad supone un fuerte impulso a la actuación de la UE en materia de seguridad vial y contribuye a lograr los objetivos de cero víctimas mortales y heridos graves para 2050.
La Asociación Española de Proveedores de Automoción (SERNAUTO) valora positivamente esta aprobación que incluye la obligatoriedad en los próximos años de una serie de medidas de seguridad en los vehículos. La revisión anterior del reglamento se realizó hace casi una década. Estas medidas representan un paso importante en la seguridad de los vehículos, ya que se trata de sistemas que ayudan a evitar los accidentes.
La aprobación por el Parlamento antes de las elecciones europeas permitirá que, después de su aprobación por el Consejo, se facilite una rápida implementación de tecnologías para salvar vidas.
La creciente demanda de vehículos más eficientes, menos contaminantes, más seguros, comunicados y autónomos representa, para el sector de proveedores de automoción, responsable del 75% del valor final del vehículo, una oportunidad para desarrollar componentes para sistemas alternativos de propulsión, nuevos materiales y diseños para el aligeramiento del vehículo, tecnologías para mejorar los sistemas de seguridad activa y pasiva para todo tipo de vehículos y la conectividad del vehículo con su entorno y para incrementar su grado de automatización, contribuyendo, con ello, contribuir a una movilidad más sostenible y segura desde el punto de vista medioambiental, económico y social.
El acuerdo alcanzado confirma que en el reglamento revisado se han incluido todas las tecnologías propuestas, incluyendo el asistente inteligente de velocidad, los sistemas de control de la presión de neumáticos, los registros de datos de accidentes, las alertas por somnolencia o abandono de carril, el frenado de emergencia y estándares de visión directa para camiones, que serán obligatorios en los nuevos vehículos de forma progresiva en los próximos años.
El nuevo reglamento acelerará el despliegue de medidas de seguridad efectivas y eficientes en costes, que ya están disponibles en el mercado, y facilitarán el camino a la conducción conectada y automatizada, aumentando la penetración en el mercado de tecnologías que serán necesarias para los vehículos automatizados del futuro.
Ahora centrándonos en España, es importante destacar que tenemos uno de los parques automovilísticos más envejecidos de Europa: La edad media de los automóviles ha pasado de los 8 años en 2007 a los 12,4 años en 2017 (1) (62% con más de 10 años), y roza los 13 años en el caso de las furgonetas (73% tienen más de 10 años). Un parque circulante muy envejecido tiene repercusiones directas que afectan no sólo al medio ambiente y a la calidad del aire de las ciudades sino también a la seguridad vial.
Existen estudios sobre el impacto del envejecimiento en los índices de siniestralidad (2). Los vehículos más antiguos no cuentan con los nuevos sistemas de seguridad (ADAS) que se han ido incorporando a los vehículos en la última década, inicialmente como opción o en los de gama alta, y posteriormente de serie en todos los vehículos. Estas nuevas funcionalidades son claves en la reducción de la siniestralidad y en sus consecuencias. Por otra parte, las emisiones contaminantes y las emisiones de CO2 de los vehículos nuevos se han reducido, aproximadamente, un 90% y un 25%, respectivamente, con respecto a las de un vehículo de más de 10 años.
Por ello, desde SERNAUTO entre las 10 propuestas para una movilidad sostenible y más segura (ver infografía) que hemos hecho llegar a los diferentes partidos políticos, destacamos dos relacionadas con la renovación del parque automovilístico:
- Los avances tecnológicos en materia de emisiones y calidad del aire y en el ámbito de la seguridad (ADAS) no pueden percibirse a gran escala sin la renovación del parque, es decir, sin la sustitución de los vehículos más antiguos por vehículos nuevos.
- Es necesario adoptar medidas de apoyo a la renovación del parque, ligando las ayudas a la adquisición de vehículos nuevos, eficientes y de bajas emisiones, al achatarramiento de los antiguos, para que tenga un impacto real en el rejuvenecimiento del parque.
