La UE debe actuar sobre las tierras raras para salvaguardar sus ambiciones verdes y digitales
Las interrupciones en las cadenas de suministro están poniendo en riesgo la producción de componentes para automóviles en Europa y la transición ecológica. Las recientes restricciones a las exportaciones han puesto de manifiesto la dependencia europea de proveedores externos para los imanes permanentes y los elementos de tierras raras. Estos imanes se utilizan en múltiples partes de un vehículo: desde el arranque del motor y la dirección asistida, hasta los sistemas de aire acondicionado y refrigeración, el control de frenado y numerosas funciones automatizadas.
CLEPA, la Asociación Europea de Proveedores de Automoción, ha publicado un nuevo documento de posición en el que expone una serie de medidas urgentes para garantizar la capacidad industrial, mantener la competitividad y evitar futuras paradas de producción.
“Los desafíos en la cadena de suministro persisten. Dado que el almacenamiento es prácticamente imposible, sigue existiendo un riesgo real de interrupciones en la producción en las plantas europeas”, afirmó Benjamin Krieger, secretario general de CLEPA. “No se trata solo de un problema logístico temporal: la dependencia total de Europa de proveedores externos constituye un riesgo estructural a largo plazo que amenaza la competitividad de la UE y pone en entredicho su capacidad para cumplir los objetivos de la transición verde y digital”.
El documento de posición de CLEPA insta a la Unión Europea a adoptar una estrategia coherente y con visión de futuro, que aborde tanto las dependencias directas como indirectas a lo largo de la cadena de valor de las materias primas críticas. Entre las principales recomendaciones se incluyen:
- Crear un entorno competitivo para los proyectos relacionados con materias primas.
- Aplicar medidas a corto plazo para prevenir interrupciones en el suministro.
- Desarrollar una estrategia europea a largo plazo para los imanes permanentes.
- Fomentar alianzas comerciales y asociaciones estratégicas.
- Impulsar estrategias coherentes de circularidad.
- Reducir los riesgos asociados a las dependencias indirectas.
CLEPA subraya la importancia de alinear estas acciones con las políticas industriales y medioambientales de la UE, en particular con el Reglamento de Materias Primas Críticas (CRMA) y el Reglamento sobre Vehículos al Final de su Vida Útil (ELVR), a fin de garantizar que la industria europea de la automoción siga siendo resiliente, competitiva y sostenible.
Descarga el documento de posición aquí