CLEPA advierte sobre el riesgo para la producción automovilística ante la interrupción en el suministro de semiconductores
El 30 de septiembre, el Gobierno neerlandés asumió el control de Nexperia, un importante fabricante mundial de semiconductores, por motivos de seguridad nacional, alegando el posible traslado de tecnología sensible a su empresa matriz china. En represalia, China ha prohibido ahora a Nexperia exportar los productos fabricados en su territorio, lo que eleva el riesgo de disrupciones generalizadas en la cadena de suministro del sector automovilístico europeo. CLEPA, la Asociación Europea de Proveedores de Automoción, está manteniendo un diálogo activo con las partes interesadas para evaluar el impacto y coordinar respuestas que garanticen la continuidad de la producción.
“Se trata de un asunto extremadamente delicado”, declaró Benjamin Krieger, Secretario General de CLEPA. “Instamos a todas las partes a actuar con integridad y prudencia. Nuestra cadena de suministro está profundamente interconectada y la transformación de la movilidad en Europa depende de un ecosistema de semiconductores estable”, añadió. “Los proveedores de automoción están sufriendo un fuerte impacto como productores intermedios, situados entre las fábricas de componentes críticos y los fabricantes de vehículos. Instamos a todos los actores implicados a colaborar de manera constructiva y a actuar con rapidez para encontrar soluciones inmediatas y viables que eviten interrupciones en la producción a lo largo de toda la cadena de valor automovilística.”
CLEPA aporta la perspectiva singular y la experiencia operativa de los proveedores europeos de automoción, que no siempre se han reflejado de forma adecuada en otros foros. “Es esencial que las voces de nuestros miembros estén representadas en los debates y en las soluciones, tanto a nivel industrial como político, para garantizar la aplicación de medidas eficaces”, subrayó Benjamin Krieger.
¿Por qué está ocurriendo esto?
Esta interrupción se produce a pesar de las reiteradas peticiones de los proveedores para diversificar las fuentes de aprovisionamiento y los lugares de producción. Nexperia tiene operaciones en Europa, pero persiste un desequilibrio estructural. Las decisiones tomadas durante años han dejado al continente sin suficiente capacidad de ensamblaje de semiconductores, y hoy estamos viendo las consecuencias. Esta situación pone de manifiesto la necesidad estratégica de reforzar las capacidades locales.
Los chips son esenciales para la electrónica de los vehículos y para más de 700 componentes críticos. Los proveedores son los primeros y los más afectados por las interrupciones en el suministro de semiconductores, y la disrupción actual representa una amenaza seria para la capacidad de producción, con un posible impacto en cuestión de días. La escasez afecta de manera continuada a sistemas electrónicos clave, como los sensores de radar, que por sí solos consumen alrededor de un millón de chips por semana.
CLEPA insta a todas las partes implicadas a buscar soluciones rápidas y pragmáticas que garanticen la continuidad de la producción en el conjunto del sector automovilístico europeo.


